sábado, 14 de noviembre de 2009

[] ------ []

El momento de huir había llegado. Las dos sombras se escurrían entre los muros como pequeños destellos. El sudor, la adrenalina, se abrían paso entre las carnes. En un momento, en un instante, todo paró. Dos personas mudas parecían arrepentirse. Cuatro esferas blancas se miraban, de iris a iris. El mundo se apagó. Todas las bocas callaron. Los dedos dejaron de golpear la mesa.

Se sentaron en la única esquina iluminada para verse las facciones. Las yemas de los dedos buscaban la piel del otro en un intento de quedarse pegados por siempre. Suaves cosquilleos que debían terminar.

- Ha llegado el momento.

- Ha llegado el momento. Respondió la otra voz.

Una sombra recorría las baldosas. Otra sombra caminaba el pasto. Direcciones opuestas de una misma recta.


] ---------------------- [


babia. 09

1 comentario: